|
IDIOMA |
|
IDIOMA |
EL CAMPANARIO DE CATI
|
Las campanas antes de la restauración |
|
Las campanas están de nuevo aquí (25-07-2012) |
|
Las campanas tras la restauración de julio 2012 |
LAS CAMPANAS DE CATÍ DESCARGAR DOCUMENTO EN PDF
Torre del campanario (Julio 2012)
El edificio del campanario fue construido durante el año 1615, con Mossèn Jaume Miralles, por Pedro del Sol, el mismo arquitecto que construyó la ermita de San Vicente (1618) y la capilla principal de la ermita de Santa Ana (1615). En cuanto al edificio del campanario que recientemente (1615- 2015) ha cumplido el cuarto centenario de su construcción requiere de una urgente revisión de mejora. Esperamos que pronto sea el momento adecuado para acometer una urgente restauración.
Tiene una capacidad máxima de ocho campanas, aunque históricamente sólo ha tenido cuatro o tres, como en la actualidad. Es una torre cuadrada, que en el segundo cuerpo es de crucería, con ocho vanos para alojar las campanas, de piedra labrada y está edificado sobre el arco principal del Coro, completamente plano, y sobre las paredes laterales.
Fachada norte del campanario (arcada recientemente abierta)
Al mismo tiempo, en julio de 2012, de las ocho aperturas o arcos de medio punto que posee el campanario de Catí, se destaparon tres de las arcadas de medio punto que estaban tapiadas total o parcialmente, las que dan al oeste y una que da al norte, quedando estas sin campanas.. Quedan actualmente dos arcadas aún tapiadas (las que dan al este), tres ocupadas por campanas (dos al sur y una al norte) y una arcada vacía (sur).
Fachada al sur y al oeste (con arcos recientemente destapados)
La mayoría de la gente sostiene que si se tapiaron antiguamente los arcos fue por algún motivo justificado. Algunos creen que fue para dar mayor resonancia y sonoridad al campanario. Según esta hipótesis, las campanas sonarán más suavemente. También hay quien sostiene que los arcos tapiados dificultaban la presencia de goteras y humedades en el coro de la iglesia que ahora aparecerán de nuevo. Otros en cambio sostienen la hipótesis de que se tapiaron para resguardar el campanario y los campaneros del fuerte viento del norte y de poniente y que llegaba incluso a hacer sonar las mismas campanas. Habrá que estudiar la posibilidad de tapar de nuevo, con nuevas tecnologías, cristales, las aberturas del campanario si alguno de estos efectos se demuestra evidente y perjudica su sonoridad o causen humitat en el Cor de l'esglèsia..
Fachada que da a levante, en la Plaza de la Iglesia, con las aberturas tapiadas
Las dos primitivas campanas (la pequeña y la mediana) fueron destruidas en plena Guerra Civil. En 1937, en plena Guerra Civil, el gobierno republicano dio una orden de que todas las campanas fueron bajadas de los campanarios para ser transformado el bronce en metralla para armamento. Así fueron destruidas las dos primitivas campanas (la pequeña y la media), al igual que la que estaba situada justamente encima de la nave central de la iglesia de la que aún queda la espadaña en el tejado. También fueron destruidas las campanas de l'Avellà y de la la ermita de Santa Anna. La campana mayor (“Maria Rosa”) se salvó para poder seguir dando los toques de las horas del pueblo y ser utilizada en caso de emergencia (toques de fuego, etc..). Finalizada la Guerra Civil, en el año 1939, fueron traídas desde un almacén militar de Barcelona por Mossèn Francisco Sanjuán, de un conjunto de campanas que se salvaron, dos campanas para sustituir las dos que se habían llevado, haciéndose en el año 1940 la última restauración del campanario.
La primera vez que se bajaron las campanas, después de la guerra, fue en 1976, hace ahora unos 42 años, con Mossèn Joaquín. Se sustituyó el sistema manual de cuerdas y el de subir al campanario para tocar las campanas “al vuelol” por un sistema eléctrico, automático y más cómodo de volteos y repiques. Para a algunos se va perdió la magia y encanto del antiguo sistema manual y del esfuerzo artístico de los campaneros por otro más impersonal, monótono y menos romántico. La comodidad con todo, acabó imponiéndose.
Campana pequeña, "Santa Bárbara", que da a las plazas.
Las dos campanas más grandes dominan el sur mientras que, en la parte opuesta sólo, queda la pequeña, mirando al norte. La campana pequeña, de nombre "Santa Bárbara", se fundió en 1929. La realizó la fundición de Constantino Linares Ortiz, proveedor de la Real Casa, Madrid. Carabanchel Bajo. Puede observarse desde las dos plazas y desde muchos puntos de la mitad norte del pueblo.
Campana mediana o "San José" en la vertiente sur del campanario
La campana mediana, de nombre "San José", fue refundida en 1911. También lleva la marca de Constantino Linares Ortiz de Madrid
Campana mayor (campana grossa), "Maria Rosa", en la fachada sur del campanario.
El peso de la campana es de 85 arrobas que equivalen a 1.086,3 kg. (Arroba = 36 libras o 12.780 kg.).
A dicha medida le habrán añadido hasta el contrapeso ... para redondear y alcanzar las 100 arrobas.
La campana mayor, de 122 cm de diámetro. es la única de origen catinense. No lleva ningún nombre grabado pero la gente la conoce como "Maria Rosa".
Es la más antigua de todas. Lleva grabada una leyenda alrededor que dice: ALABADO SEA EL SANTÍSIMO SACRAMENTO- LUIS MAÑES ME YZO - AÑO 1833. En su exterior presenta grabados una cruz, por su parte posterior, y un cuadro con una Virgen, en su parte anterior . Aunque su peso es de unos 85 arrobas (1.050 kg), el dicho popular le ha añadido algunas más. Esta dice
"María Rosa em diuen,
cent robes peso.
Qui no sho crega,
que me sospeso ".
"Maria Rosa me llaman",
cien arrobas peso.
El que no se lo crea
que me sospeso (sostenga)".
Esta campana la refundió Luis Mañes, campanero de Mas de las Matas (Teruel) en un huerto que corresponde al patio de la casa de Julián, el herrero, durante el mes de septiembre de 1833. El día 1 de octubre la gente de Catí, con la ayuda de unos marineros de Vinaròs, la subieron al campanario, siendo bendecida y empezando a tocar al día siguiente.
Campanas del sur: San José y María Rosa (Observar a la izquierda la fecha de 1940)
Resúmen de lo que nos cuenta Mossen Joan Puig:
El Consejo para recaudar fondos con los que pagar la campana vendió unas tierras que poseía en la partida del Salt (Venta del Aire) por las que pagó 25 libras el vecino Jaume Segura Salvador, del Mas de Eixemeno, el 09 de septiembre 1827.
1827. Día 5 de septiembre. - Se encarga refundir la campana mayor, de unas 85 arrobas, al campanero del Mas de las Matas Luis Mañez ..
Año 1833. Año de la función y colocación.
Sábado 28 de septiembre. - Se hace la fundición en el huerto que corresponde al bancal, ahora patio de la casa de Julián el herrero. (Sobre el año 1962, siendo rector Mossèn Salvador, se encontró, además a 2 metros de profundidad, un vacío que, al deshacerse, conservaba las huellas de la fundición de la campana. Seguramente aún quedan restos de los moldes de la fundición enterrados, según Julián).
Domingo, 29 y Lunes 30: El bronce fundido va ocupando el lugar entre los moldes el día de San Miguel y permanece cubierta hasta las 6 de la tarde del lunes
Lunes 30 de septiembre. - Se descubre y traslada hacia el portal de la Font Vella (el que unía la Raval del Hospital con la calle Mayor) girando sobre una viga, hasta dejarla al pie del campanario.
Martes 1 de octubre. - Tres marineros de Vinaròs y el resto de gente la subieron al campanario.
Miércoles 2 de octubre. - A las doce se coloca en su sitio y se toca en ella el Ave María. A las dos y media se bendice por todo el clero en la torre. Estuvo tocando hasta el sábado y, con este motivo, se toreó por todo el pueblo, y se mató este sábado, una vaca de Vallivana.
La última vez que se bajaron las campanas, después de la guerra, fue en 1976, hace ahora unos 36 años, con Mosén Joaquín. Se sustituyó el sistema manual de cuerdas y el de subir al campanario para tocar las campanas "al vuelo" por un sistema eléctrico, automático y más cómodo de volteos y repiques. Para algunos se perdió la magia y encanto del antiguo sistema manual y del esfuerzo artístico de los campaneros por otro más impersonal, monótono y menos romántico. La comodidad pero, acabó imponiéndose.
Hace ya bastantes años que las campanas han reducido, por no decir que han perdido, muchas de sus funciones. Recordemos los tres toques del Ave María al amanecer, mediodía y tarde, los toques de queda, a rebato (sometent) o molino, de consejo, de vísperas, de difuntos con sus variantes según fuera hombre o mujer el muerto. Cada uno de ellos era diferente y tenían funciones diferentes. Además de estos estaba el toque de fieles y el volteo general o "campanas al vuelo '.
En el mes de agosto de 1995, acertadamente, se iluminó el campanario, aumentando la vistosidad y convirtiéndose en un símbolo de identificación de todo el pueblo.
25 de julio de 2012- Las campanas vuelven al campanario
Recientemente (julio de 2012), siendo alcalde Manuel Luis Puig y cura de la parroquia Mossèn Rafael, el badajo de la campana mayor (campana grossa o Maria Rosa) en marzo de 2012 se desprendió cayendo sobre el tejado de la Casa Abadia. Paralelamente este hecho coincidió con una avería del reloj del campanario que dejó de funcionar. Así es que se decidió bajar nuevamente las campanas para hacerlas una revisión de mantenimiento y repararlas. Tal cosa se efectuó el día 10 de julio de 2012. Después de estar el pueblo unos díes sin campanas éstas retornaron al pueblo el 25 de Julio, día de Santiago. Los dos días, sobre todo el día en que volvieron las campanas completamente nuevas y relucientes fue una gran fiesta. La gente se arremolinó debajo del campanario observando com una moderna grúa hacía rápidamente el trabajo que antes costaba tanto esfuerzo de hacer. Al mismo tiempo fueron muchos los que aprovecharon la ocasión para a retratarse al lado de las campanas. La opinión mayoritaria de la gente era de que a nivel de tierra parecían mucho más grandes i relucientes que en el campanario.
En la actual reparación y revisión se ha limpiado y sustituido todos los elementos secundarios (poleas, motores, etc.). Se pretende automatizar su funcionamiento recuperando los antiguos toques (Ave María, difuntos, fuego, queda, .. además de campanas al vuelo). Al mismo tiempo se ha digitalizado el funcionamiento del reloj que funcionará informáticamente por internet).
El único inconveniente de esta última restauración fue el elevado coste económico que supuso, alrededor de 18.000 euros. Para poder obtener esta respetable cantidad, Mosén Rafael estuvo recolectando donativos. Al mismo tiempo se constituyó un grupo de recuperación de las campanas y el reloj que se encargó de planificar actividades (rifa, comidas de hermandad, etc ..) para conseguir el dinero que complementara a los donativos.
Recibo de participación en el pago del reloj (acredita la fecha: mayo de 1951). (Facilidad para F. Segura)
El reloj actual data de mitad del siglo XX. Fue pagado en participaciones de los vecinos del pueblo. Fue inaugurado en 1952 siendo Francisco Blasco alcalde. Hace los toques de las horas, medias y cuartos con la ayuda de la campana mayor (María Rosa).
Reloj del campanario tras la reforma de julio de 2012, por encima de la campana gorda (María Rosa) con la que hace los toques (horas, medias y cuartos)
En julio de 2012, coincidiendo con la reforma y restauración de las campanas, la maquinaria del reloj como tal fue sustituida por un ordenador (Sirio 12), de la casa ECAT MONDOVI, con el que las horas se actualizan permanentemente por internet ( decisión discutida por los expertos), ya que el ordenador rápidamente se queda obsoleto, de hecho ya lo está, en cambia, la maquinaria de un reloj bien cuidado dura siglos.
Moderno ordenador programador ECAT MONDOVI SIRIUS 12 de cuadro de mando digital del reloj y de los toques de las campanas.
Bibliografía:
Paco Martín García Programa de Fiestas Patronales de Catí 1997
Padre Joan Puig
Última actualización: 14 de noviembre de 2018
